El “employer branding”, o marca empleadora, se ha convertido en un pilar fundamental para las organizaciones que desean atraer y retener al mejor talento. En un mercado laboral cada vez más competitivo, donde los candidatos valoran tanto la cultura organizacional como las oportunidades de desarrollo profesional, una estrategia sólida de employer branding puede marcar la diferencia.
A día de hoy existe un desajuste entre los puestos demandados y las personas con las competencias necesarias para ejecutarlos. Un ejemplo claro es el sector TIC, en el que, según el estudio de Empleabilidad y Talento Digital de VASS, 7.000 posiciones quedan sin cubrir cada año por falta de profesionales técnicos.
Employer branding podría traducirse literalmente como marca empleadora. Si la imagen corporativa se centra en ofrecer la mejor visión posible de la empresa para los clientes, el employer branding busca mejorar la percepción de la entidad que tienen los propios empleados y los candidatos a formar parte de la plantilla de la empresa.
En España la preocupación por el employer branding ha llegado mucho más tarde, pero lo ha hecho con fuerza y con una evolución constante que se espera que sea aún mayor este 2024.
Los beneficios de invertir en employer branding son claros: mejora la atracción de candidatos, reduce la rotación de personal y aumenta el compromiso y la satisfacción de los empleados. Además, una marca empleadora sólida se convierte en un diferenciador competitivo, no solo para atraer talento, sino también para fidelizar a los clientes y fortalecer la posición de la empresa en el mercado.
La misión del Máster en Recursos Humanos: Dirección y Gestión de Personas 4.0 es formar de manera práctica y competitiva a los actuales y futuros profesionales del área de Recursos Humanos, a través de la adquisición, fortalecimiento, ampliación y actualización de conocimientos y competencias que le permitan afrontar con éxito el desarrollo de sus actividades profesionales.
La Unión Europea quiere mostrarse como “referente mundial” en materia de regulación de inteligencia artificial.
Entre las medidas que esta ley propone destacan la prohibición de vigilancia masiva, la defensa de derechos de autor o la creación de una oficina europea de IA.
El Pleno del Parlamento Europeo aprobó el pasado miércoles la primera ley sobre inteligencia artificial a nivel mundial. Sin embargo, aún está pendiente de la ratificación del Consejo de la Unión Europea en las próximas semanas. Si así fuera, su entrada en vigor ocurriría previsiblemente en 2026. La primera propuesta de un marco regulador se hizo casi tres años atrás, en abril de 2021.
Esta normativa establece condiciones para el uso de la inteligencia artificial según el riesgo que represente para los ciudadanos. Con esta acción, la UE busca liderar con el ejemplo a nivel global y fortalecer la industria europea frente a competidores como Estados Unidos y China.
Thierry Breton, comisario europeo de Mercado Interior y promotor de la iniciativa, ha destacado que Europa se posiciona como un “referente mundial” en este campo. Además, ha añadido que las regulaciones atañen a lo “mínimo indispensable, pero lo necesario”.
La nueva legislación sobre inteligencia artificial (IA) presenta una serie de disposiciones y obligaciones que buscan regular su uso de manera ética y responsable en la Unión Europea.
Para prevenir consecuencias adversas, es necesario que los sistemas de inteligencia artificial sean supervisados por individuos en lugar de operar de manera totalmente automatizada. La normativa establece distintas obligaciones para proveedores y usuarios de IA, las cuales varían en función del nivel de riesgo asociado a la tecnología. En este sentido, el sitio web del Parlamento Europeo diferencia entre las siguientes categorías de riesgo:
Estas medidas estarán bajo una supervisión humana y no automática. Así, se podrán garantizar unos resultados óptimos que eviten consecuencias perjudiciales.
La página web del Parlamento Europeo subraya que la misión de esta ley es “garantizar que los sistemas de IA utilizados en la UE sean seguros, transparentes, trazables, no discriminatorios y respetuosos con el medio ambiente”. En resumen, la ley pretende fomentar la excelencia y la innovación tecnológica, pero protegiendo y asegurando los derechos fundamentales.
El psicólogo estadounidense David McClelland analizó en 1998 más de 30 organizaciones, y llegó a la conclusión de que aquellas que poseían líderes con competencias en inteligencia emocional habían superado entre un 15% y un 20% sus objetivos anuales de ingresos.
Contrariamente a la creencia de que la capacidad de liderazgo es un rasgo innato, que sólo se manifiesta en los más precoces del mundo, la realidad es que las habilidades de liderazgo pueden cultivarse.
Desarrollar la inteligencia emocional no es tarea de una sola vez, sino un proceso continuo que evoluciona con el tiempo y la experiencia. Es esencial para fomentar una atmósfera de apoyo que mejore la comunicación, la motivación y la adaptabilidad del equipo.
En la actualidad, el liderazgo y el crecimiento personal no solo son deseables, sino esenciales para el éxito y la innovación. Desarrollar estas habilidades puede transformar la forma en que enfrentamos los desafíos, lideramos equipos y alcanzamos objetivos.
Desarrollando Habilidades de Liderazgo
El liderazgo efectivo se construye sobre la base de habilidades comunicativas sólidas, la capacidad de tomar decisiones informadas y la habilidad para motivar e inspirar a otros. Aquí te presentamos tres estrategias fundamentales:
El crecimiento personal es un viaje continuo de auto-mejora. Aquí algunas estrategias para avanzar en este camino:
Desarrollar habilidades de liderazgo y fomentar el crecimiento personal son procesos continuos que enriquecen nuestra vida profesional y personal. Al adoptar estas estrategias, no solo mejoramos como individuos, sino que también contribuimos al éxito y bienestar de nuestros equipos y organizaciones. Empezar hoy es el primer paso hacia un mañana más prometedor.
Las metodologías ágiles se han convertido en una parte fundamental de la gestión empresarial moderna, ofreciendo un marco para mejorar la eficiencia, fomentar la colaboración y adaptarse rápidamente a los cambios. Estas metodologías se basan en principios de iteración, flexibilidad y respuesta rápida, pero ¿Cómo se pueden aplicar en el ámbito empresarial más amplio?
Antes de implementar cualquier metodología ágil, es crucial comprender sus principios fundamentales. Esto incluye el valor de la colaboración, la adaptabilidad frente a los cambios, el enfoque en la entrega de valor y la importancia de construir proyectos en torno a individuos motivados.
Las metodologías ágiles enfatizan la importancia del trabajo en equipo y la comunicación. Para aplicarlas efectivamente, promueve una cultura donde la colaboración es la norma. Esto incluye fomentar la comunicación abierta, el respeto mutuo y la responsabilidad compartida. Herramientas como Scrum y Kanban pueden ser útiles para visualizar el trabajo y promover esta cultura de equipo.
Una característica clave de las metodologías ágiles es su enfoque iterativo. En lugar de planificar todo el proyecto de principio a fin, los equipos trabajan en ciclos cortos llamados sprints, que permiten una revisión y adaptación constantes. Esto significa establecer objetivos a corto plazo y estar dispuesto a ajustar los planes en función de los resultados y el feedback recibido.
Las metodologías ágiles colocan al cliente en el centro del proceso de desarrollo. Esto implica una comunicación constante con el cliente para entender sus necesidades y ajustar el producto o servicio en consecuencia. Asegúrate de que los equipos tengan acceso directo al feedback del cliente y lo utilicen como una guía para la mejora continua.
La retrospección es un aspecto fundamental de las metodologías ágiles. Al final de cada sprint, los equipos deben reunirse para discutir qué funcionó, qué no y cómo pueden mejorar. Esta cultura de mejora continua no solo ayuda a optimizar los procesos sino también a aumentar la satisfacción del equipo.
Aplicar metodologías ágiles en la gestión empresarial requiere un cambio de mentalidad tanto a nivel individual como organizacional. Implica pasar de una planificación rígida a un enfoque más flexible y adaptativo. Aunque el camino hacia la agilidad puede presentar desafíos, los beneficios de mayor eficiencia, satisfacción del cliente y capacidad de adaptación lo convierten en un esfuerzo valioso.
Todo ello, obviamente, con el principal objetivo de alcanzar la plena satisfacción de los clientes. Es importante señalar que la utilización de metodologías ágiles juega un papel muy importante a la hora de alcanzar el éxito, siendo un gran impulsor para ello.
En EUDE Business School contamos con una amplia oferta académica para brindar a nuestros alumnos los conocimientos y herramientas más demandados en el mercado actual. Con nuestro Máster en Dirección de Empresas y Gestión de Proyectos en modalidad presencial, el alumno podrá aprender los criterios y herramientas necesarias para analizar, diagnosticar, definir, implantar y controlar la estrategia más adecuada para la empresa, analizando las diferentes alternativas estratégicas y ventajas competitivas conforme a las circunstancias del mercado en su conjunto.
La sostenibilidad, en estos momentos, se ha convertido en un diferenciador clave para las marcas, influyendo en la lealtad del consumidor y la reputación corporativa.
No solo es un deber moral, sino también una estrategia empresarial inteligente que implica cultivar relaciones sólidas con los consumidores y mejorar la imagen corporativa.
Evolucionamos hacia un mundo cada vez más consciente del medio ambiente y socialmente comprometido. Ahora, las empresas se enfrentan a la creciente presión de adoptar prácticas sostenibles. Esto, no solo aparece como un deber moral, sino también como una estrategia empresarial inteligente. La sostenibilidad no solo implica reducir el impacto ambiental, sino también cultivar relaciones sólidas con los consumidores y mejorar la reputación corporativa. Herramientas como las prácticas sostenibles, que influyen en la percepción de los consumidores sobre una marca; o la sostenibilidad, se han convertido en pilares imprescindibles de cualquier estrategia de marketing.
En los últimos años, los consumidores han aumentado su conciencia sobre el impacto ambiental y social de sus decisiones de compra. Ya no se trata solo de adquirir un producto, sino de apoyar a empresas que demuestran un compromiso genuino con la sostenibilidad. Según un informe de Nielsen, el 73% de los consumidores a nivel mundial estarían dispuestos a cambiar sus hábitos de consumo para reducir su impacto en el medio ambiente. Esta tendencia ha llevado a las empresas a reconocer la importancia de incorporar la sostenibilidad en su ADN corporativo.
La adopción de prácticas sostenibles no solo es una cuestión ética, sino también un diferenciador de marca clave en un mercado saturado. Las empresas que destacan por su compromiso con la sostenibilidad tienen una ventaja competitiva al atraer a consumidores preocupados por el medio ambiente. Alrededor de un tercio de los consumidores prefieren marcas que demuestran un compromiso social y ambiental.
Las prácticas sostenibles no solo impactan en la percepción inicial de una marca, sino que también fortalecen la confianza y la lealtad a largo plazo. Los consumidores están dispuestos a pagar más por productos y servicios que perciben como sostenibles y éticos. Además, las empresas que priorizan la sostenibilidad están mejor equipadas para gestionar crisis reputacionales, ya que tienen una base de consumidores más comprometida y dispuesta a perdonar errores.
Las empresas están adoptando enfoques innovadores para comunicar sus iniciativas de sostenibilidad a los consumidores. Desde campañas publicitarias hasta etiquetado de productos, las marcas están destacando su compromiso con el medio ambiente y la responsabilidad social.
Sin embargo, el marketing de sostenibilidad no está exento de críticas. El greenwashing, o lavado verde, ocurre cuando las empresas hacen afirmaciones exageradas o engañosas sobre su compromiso con la sostenibilidad para obtener una ventaja competitiva. Esto puede tener consecuencias negativas, erosionando la confianza del consumidor y dañando la reputación de la marca. Por lo tanto, es crucial que las empresas sean transparentes y auténticas en sus esfuerzos de sostenibilidad para evitar la percepción de greenwashing.
En resumen, la sostenibilidad se ha convertido en un pilar fundamental en la estrategia de marketing corporativo. Las empresas que adoptan prácticas sostenibles no solo contribuyen al bienestar del planeta y la sociedad, sino que también construyen marcas más sólidas y confiables. A medida que la conciencia del consumidor continúa evolucionando, se espera que la sostenibilidad juegue un papel aún más importante en la diferenciación de marca y la construcción de relaciones duraderas con los consumidores. En última instancia, la sostenibilidad ya no es simplemente una opción para las empresas, sino un imperativo empresarial en un mundo cada vez más consciente y preocupado por el futuro del planeta.
En el entorno empresarial actual, cambiante y lleno de retos, la figura del Project Manager se ha convertido en un pilar imprescindible para dirigir equipos de manera eficaz y alcanzar el éxito en proyectos cada vez más complejos y orientados hacia la innovación.
Hasta ahora, el papel del Project Manager se veía como el guardián de los plazos, presupuestos y alcances del proyecto. Pero su perfil ha evolucionado para convertirse en un catalizador de cambio y un visionario capaz de liderar equipos a través de la incertidumbre hacia nuevas fronteras de la innovación.
Planificación y organización de proyectos
Gestión del equipo y la comunicación
Toma de decisiones y la resolución de conflictos
La última década ha sido testigo de una transformación profunda en el papel del Project Manager. Lo que comenzó como una posición enfocada en la supervisión y ejecución meticulosa de planes de proyecto se ha transformado en un rol mucho más dinámico y adaptativo.
La adaptabilidad se ha convertido en una de las características más valoradas en un Project Manager. La capacidad para ajustarse rápidamente a nuevos desarrollos, adoptar tecnologías emergentes y pivotar estrategias en respuesta a los cambios del mercado es crucial. Además, el enfoque en la agilidad y la innovación ha requerido que los Project Managers desarrollen habilidades en liderazgo de equipos multidisciplinarios, fomentando un ambiente de trabajo colaborativo que es esencial para la innovación.
La evolución del rol también ha sido impulsada por un cambio en las expectativas de lo que los proyectos deben lograr. Ya no se trata solo de entregar dentro del tiempo y el presupuesto asignados, sino de garantizar que los proyectos contribuyan directamente a la estrategia de innovación de la empresa. Esto significa que los Project Managers de hoy deben ser estrategas, capaces de ver más allá del horizonte del proyecto para entender cómo este se alinea y potencia los objetivos a largo plazo de la organización.
La caja de herramientas del Project Manager en 2024 está llena de innovaciones diseñadas para mejorar la eficacia y fomentar la innovación. Herramientas de gestión de proyectos basadas en la nube, plataformas de colaboración en tiempo real, y soluciones de inteligencia artificial y análisis de datos son fundamentales para facilitar la gestión de proyectos complejos y distribuidos globalmente.
La adopción de metodologías ágiles continúa creciendo, con marcos como Scrum, Kanban, y SAFe liderando el camino en la promoción de la flexibilidad, la entrega continua y la adaptabilidad. Sin embargo, lo que marca 2024 es la integración de estas metodologías con principios de innovación sistemática, como el Lean Innovation y el Design Thinking, ofreciendo un enfoque holístico que no solo se enfoca en la entrega eficiente sino también en asegurar que los proyectos entreguen valor real e innovación.
Uno de los principales desafíos es mantenerse al día con el ritmo acelerado de la tecnología y las metodologías emergentes. La rápida evolución de las herramientas digitales y las expectativas cambiantes de los stakeholders requieren una actualización constante de habilidades y conocimientos.
Sin embargo, estos desafíos también abren la puerta a oportunidades significativas. La tecnología y las metodologías innovadoras permiten a los Project Managers liderar proyectos de manera más eficiente y efectiva, con herramientas que ofrecen insights en tiempo real y facilitan la toma de decisiones basada en datos.
La habilidad para gestionar proyectos complejos e innovadores se está convirtiendo en una competencia clave demandada en todas las industrias, ofreciendo a los Project Managers un campo amplio para el desarrollo de carrera y la especialización en sectores emergentes como la tecnología verde, la inteligencia artificial y la digitalización de servicios.
La gestión de proyectos es un trabajo difícil y estimulante, que puede dar grandes satisfacciones a personas dinámicas, motivadas por contextos profesionales que exigen responsabilidad, competencias transversales y dotes de comunicación.
Con el MBA en Gestión de Proyectos de EUDE Business School, los profesionales recibirán la formación necesaria y las habilidades que todo Project Manager debe poseer para llevar al éxito a su organización y conseguir proyectos de alto impacto que cumplan los más altos objetivos.
En definitiva, el Project Manager en 2024 es más que un gestor de proyectos; es un visionario, un estratega y, sobre todo, un innovador. La capacidad de estos profesionales para liderar en tiempos de cambio no solo asegura la entrega exitosa de proyectos complejos sino que también impulsa la innovación continua, esencial para el crecimiento y la competitividad en el siglo XXI.