Claves para encontrar tu verdadera vocación

Elegir los estudios correctos nos convierte en personas más creativas en el camino a seguir para conseguir la excelencia.

 

Conocer nuestras competencias y habilidades personales nos ayuda a tomar las mejores decisiones, tanto vitales como profesionales.

 

Todo el mundo tiene una vocación y encontrarla depende de uno mismo. Solo así se consigue alcanzar la máxima satisfacción con el trabajo desarrollado o con los estudios que se siguen a lo largo de la vida. Dedicarse a labores profesionales que nos apasionan permitirán que contemos con mayores recursos para disfrutar del trabajo tomando en consideración tanto las funciones y actividades para la que hemos sido contratados, así como ser selectivos a la hora de escoger el campo de trabajo y el tipo de empresa donde deseamos poner en práctica nuestros conocimientos.

 

“La realización y el desarrollo del propio potencial es también algo importante para vivir una vida más feliz y significativa”, destaca Paolo Lombardo, responsable del Máster de Recursos Humanos en EUDE Business School.

 

Para los estudiantes elegir una profesión que les apasione hasta el punto de que sientan que no se trata solo de un trabajo remunerado les permitirá mejorar cada día su desempeño laboral, poniendo a prueba su creatividad y facilitando además el compromiso en que se fundará la relación de trabajo dentro de la empresa, con el objetivo final de intentar alcanzar la excelencia.

 

EUDE Business School enumera a continuación las claves para encontrar la vocación de sus futuros estudiantes:

 

 

 

 

 

Los principales perfiles en el Departamento de Recursos Humanos

Cuando se habla de Recursos Humanos se hace referencia a una disciplina muy amplia que abarca trabajos y labores muy distintos dentro de una empresa. Debido a la aparición de Internet, los perfiles de RRHH se han enriquecido y ahora es habitual encontrar profesionales especializados en un ámbito concreto.

 

Puede que te hayas planteado estudiar Recursos Humanos pero todavía no tengas muy claro cuáles son los principales perfiles profesionales dentro de este ámbito. Por ello, en este post resolvemos tus dudas y te los explicamos:

 

  1. Director de Recursos Humanos o HR Director

Es el puesto de mayor responsabilidad dentro del departamento, y es el que coordina todos los demás perfiles para conseguir un correcto funcionamiento dentro del equipo de trabajo, promover los valores, administrar las nóminas, garantizar la igualdad de oportunidades entre trabajadores y negociar sueldos o condiciones laborales.

Dependiendo del tamaño de la organización, el director de RRHH tiene la responsabilidad de todas las funciones relacionadas con las necesidades y las actividades de las personas de la empresa.

Su sueldo suele estar relacionado con el tamaño de la empresa, por lo que cuanto más grande sea ésta, mayor será lo que gane. De acuerdo con un estudio realizado por Michael Page, en España el salario medio de este profesional alcanza 84.000 euros brutos al año.

 

  1. Técnico de recursos humanos

Este puesto conlleva responsabilidades muy variadas como tareas administrativas o apoyo en los procesos de selección. Es una de las salidas para aquellos que han realizado un grado en recursos humanos.

Generalmente, se trata de un perfil junior que todavía tiene mucho que aprender, y por lo tanto, a partir de mejorar su formación y de esta experiencia, puede optar a un puesto superior.

 

  1. Responsable de selección

Se encarga de incorporar talento y cubrir vacantes según las necesidades de la empresa, además debe desarrollar una serie de estrategias que le permita descubrir potenciales empleados que puedan encajar a la perfección con el puesto a cubrir.

Actualmente los responsables de selección utilizan las redes sociales para encontrar a candidatos para la empresa, dado que cada vez más la gente busca trabajo en aplicaciones a través de ordenador o móvil.

 

  1. Consultor de reclutamiento independiente

El consultor puede trabajar de manera fija en la empresa o también estar contratado de manera externa. En el caso de un consultor independiente  de reclutamiento, su trabajo es el de intermediador entre el candidato y la empresa.

De esta manera, deberán ayudar a las compañías a cubrir sus puestos de trabajo con personas cualificadas y su tarea es contactar con posibles candidatos y recopilar información de ellos, permitiendo el ahorro en tiempo y coste.

 

  1. Técnico de Formación

El técnico en formación se ocupa del desarrollo profesional y de aprendizaje de los empleados. Por lo tanto, debe analizar las necesidades existentes con respecto a la formación del equipo: por ejemplo, aprender un nuevo idioma, si aparecen clientes extranjeros.

Pero no solo se encarga de establecer objetivos para la formación sino que también de la gestión de costes, presupuestos y bonificación de los cursos para empleados.

 

  1. Técnico TIC

Se encargan de diseñar los programas de formación relacionados con las nuevas tecnología de la información y de la comunicación (TIC). Suelen ser también expertos en Competencias Profesionales de TIC, como Office, SAP, navegadores de Internet y aplicaciones específicas de la compañía.

 

  1. Técnico de comunicación interna

Es una persona clave para mejorar el compromiso y la conducta de los trabajadores mediante diferentes canales. No todas las empresas cuentan con un técnico de comunicación interna, de hecho, algunas no pueden incorporarlos debido a que no disponen de presupuestos.

 

  1. Coaches

El coach u orientador ofrece ayuda a los trabajadores para su desarrollo personal, de este modo, los guía para alcanzar metas personales y profesionales. Facilita que las personas se puedan adaptar a los cambios y que los equipos humanos sean sólidos.

 

En los últimos años, es cada vez más habitual que las empresas externalicen las tareas vinculadas a la administración del personal, es decir, que las dejen en manos de asesorías  consultorías externas especializadas (outsourcing). De esta manera, las personas que trabajan en RRHH tienen más tiempo para dedicarse a otro tipo de tareas que generen mayor valor añadido a la empresa.

 

Como has podido comprobar, los perfiles del departamento de RRHH son muy variados. Por eso, el diseño y la organización de un departamento de RRHH es muy importante, se tiene en cuenta aspectos como: el tamaño de la empresa, los recursos económicos, los trabajadores asignados, la posible externalización de parte de las tareas, entre otras cuestiones.

 

El Máster en Recursos Humanos de EUDE Business School te capacita como líder y especialista en la gestión del Capital Humano para poder dar soluciones globales a las necesidades de captación y retención del personal.

 

Marca personal y marca profesional: ¿hay una delgada línea?

La marca personal es la culminación de tus acciones; es una imagen que es útil durante tu búsqueda de trabajo, que te identifica como un paquete específico, bien definido de habilidades, talentos y experiencias. Eres tú, por fuera y por dentro, en el sentido de que eres único.

 

La marca personal tiene mucho que ver con la emoción que las personas sienten cuando piensan en ti, pero está enraizada en la autorreflexión y la integridad. Aunque existen diferencias obvias entre lo que eres tú y la marca, se podría considerar que tu marca personal puede ayudarte en tu búsqueda de empleo, y en la continuidad de tu carrera profesional. En otras palabras, la creación de una marca personal influye en tu marca profesional y te abre nuevas puertas en el mercado laboral.

 

¿Sabías que la primera impresión solo toma 7 segundos? Solo 7 segundos para retratar tu personalidad, tus logros y tus valores. Solo piensa en cuántas interacciones tienes en un día y cuántas personas nuevas conoces. Cada una de esas interacciones puede afectar tu marca y todas se suman a una imagen colectiva de quién eres, en función de las percepciones de los demás. Porque cuando se trata de marca personal, lo que importa no es cómo te ves a ti mismo, sino cómo te ven los demás.

 

De esta manera, todos los profesionales deben considerar su marca personal por los siguientes motivos:

Como ves, la marca se trata de hacer todo lo posible para gestionar las percepciones que otros tienen de ti. Como no puedes alcanzar la cabeza de otra persona y modificar cómo te ve, todo lo que puedes hacer es cambiar tu imagen, tus mensajes, tu aspecto, etc., para alinearte mejor con lo que realmente eres.

En lugar de esperar que los demás formulen opiniones aleatorias sobre quién eres que pueden ser o no precisas, ayúdalos compartiendo una marca bien diseñada. EUDE Business School te da las claves:

  1. Diferenciarte de los demás

Diferenciarte de todos los demás candidatos potenciales para un trabajo significa ser tú mismo, como en tu auténtico “yo” verdadero. La marca personal te permite brillar animándote a mirar hacia adentro y evaluar qué te hace diferente de los demás. Solo después de completar esta evaluación interna tendrás suficiente información para decir: “Soy mejor que nadie para este puesto porque…”. El autoconocimiento es la clave para construir la confianza que te ayuda a destacar y ser único.

  1. Mantener una constante presencia online

Tu identidad online debe ser coherente sin importar dónde te busquen. Si trabajas de manera correcta en tu marca personal, te puedes convertir en un único pensamiento en la mente de un posible director de Recursos Humanos. Cuando hayas terminado con el proceso de desarrollo de tu marca, tu perfil de LinkedIn coincidirá con sus otros perfiles online. Y si tienes la oportunidad de enviar un currículum, tu marca también estará visible allí.

  1. Simplifica tu proceso en la toma de decisiones

Tener una marca personal claramente definida puede ayudar a que las decisiones de tu carrera sean más fáciles. Cuando surgen oportunidades profesionales de las que no estás seguro, puedes consultar tu marca para obtener una orientación.

Por ejemplo, si has determinado que prefieres las empresas pequeñas y no deseas viajar, entonces sabes que rechazar un trabajo en una organización grande y burocrática que envía a sus empleados a todas partes contribuirá a que se mantenga tu perfil.

  1. Gestionar tu carrera vs Encontrar trabajo

Para tener una marca personal efectiva, piensa en ti mismo como el CEO de tu propia empresa. Cualquier trabajo que tienes es solo un contrato a corto plazo. En los Estados Unidos, donde el tiempo promedio de un trabajo es de dos años, este punto de vista te permite administrar tu carrera profesional. Mantener una marca personal sólida te ayuda a minimizar las brechas entre los trabajos porque estás haciendo lo siguiente:

 

Mucha presión ¿eh? No es tan amenazador si te tomas el tiempo para desarrollar una marca personal fuerte y la vives y la mantienes en tu núcleo. Te ayudará a sentirte cómodo contigo mismo y ganarás confianza, lo que te ayudará a avanzar en tu carrera profesional.

Daniel Benjumea nos habla del Liderazgo Celular

Hemos pasado tiempos de “crisis” y ya ha llegado el momento de renovar el liderazgo dentro de las Organizaciones.

 

Después de varios años de Liderazgo Re-Activo, un liderazgo basado en la Misión, Visión y Valores Organizacionales en los que la doctrina predominante era mantener un Delivering Happines dentro de la Organización “a pesar de la que estaba cayendo”, llega el momento de la Innovación y el Liderazgo Creativo.

 

Inicialmente se ha hablado de conceptos como el Liderazgo del Carácter y la Personalidad como bien lo definía S.Covey, ambos marcaron un punto de inflexión en la época de la I Guerra Mudial, si bien luego se ha hablado de otros modelos de Liderazgo, como el de K. Blanchard ( Liderazgo Situacional) o los tan implantados en épocas de cambio y crisis como son el Transaccional y el Transformacional.

 

De los legados más recientes, tenemos el Liderazgo que nos ha dejado Zigmunt Bauman, denominado Liderazgo Líquido, un liderazgo flexible y que se basa en los conceptos de la globalización y los nuevos modelos de relación a través de la tecnología y las redes sociales. “La sociedad líquida” lo define este gran pensador de la era moderna.

 

Todos estos modelos de liderazgo tienen como punto de partida las conductas, comportamientos y competencias que socialmente están asociadas a la consecución del éxito dentro y fuera de las organizaciones. Son las teorías de desarrollo de lo que denominaríamos un liderazgo social y corporativo.

 

El Liderazgo como competencia tiene fecha de caducidad por lo tanto, dado que está sujeto a acciones concretas en entornos concretos por perfiles concretos. El ejemplo más claro lo tenemos en la carrera de un directivo, la carrera de un deportista de élite o simplemente la carrera de un político, el Líder mientras ejerce ese cargo, puesto u ocupación y siempre que cumpla con las expectativas esperadas por el público objetivo que será quien le otorgue o no el beneficio del liderato.

 

El Liderazgo Innovador y Creativo es un Liderazgo sin fecha de caducidad, y que además deja esa huella y esa esencia sin necesidad de estar sujeto a ninguna acción, entorno o puesto de ocupación.

 

El Liderazgo Innovador y Creativo no nace de una necesidad social que también tiene fecha de caducidad, ni de un resultado concreto ya sea económico, moral, deportivo, empresarial, familiar o social. Es por lo tanto un liderazgo Celular, cuya sólo existencia da vida a todo aquello para lo que se ha destinado.

 

Es un Liderazgo no basado en Valores, ni en ética Social sino que más bien se basa en la conexión de quien lidera con el mundo y el entorno en el que vive. Se trata de formar un ecosistema en el que constantemente se esté evaluado y proyectando soluciones mediante sinergias basadas en las fortalezas y no en los puntos débiles. Se trata de “soltar” el control de las cosas y las personas para tomar la “gestión” de uno mismo y sus propósitos vitales.

 

El Propósito es un elemento tan poderoso que bien definido y estructurado genera por si sólo un liderazgo social ya que persigue fines nobles, comprometidos y sobre todo hace que quien lo lleva a cabo proceda de manera alineada con sus pensamientos y acciones por lo que en ello va implícita toda la ética y valores que en otra época y con otros modelos habría que definir.

 

Para poder llevar este nuevo modelo de Liderazgo Celular hay algunos Tip,s que debemos llevar a cabo de forma consciente:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Recuerda que ser un@ Líder no es sinónimo de Liderar y que para poder Liderar, hay que empezar por liderarse a un@ mism@.

 

El Liderazgo Celular es aquel que obra de forma individual y nace de un gran y amplio autoconocimiento puesto al Servicio y desarrollo de los fines Sociales para los cuales se le ha encomendado. Al igual que una célula del cuerpo, este modelo tiene un efecto multiplicador dentro del gran Organismo y Sistema Social que conformamos dentro y fuera de las Organizaciones.

 

Daniel Benjumea Aparicio

Docente  de Habilidades Directivas y Toma de Decisiones

Jefe vs. Líder: ¿en qué se diferencian?

Ser un jefe no es lo mismo que ser un líder. Para entender la diferencia entre ambos es necesario comprender cuáles son las principales características que separan a uno de otro. Un líder puede ser un jefe, pero un jefe no puede ser un líder. ¿Estás confundido? Te lo explicamos. 

 

  1. Un jefe se premia a sí mismo/ Un líder premia a los demás

 

Un jefe raramente se responsabiliza de sus errores, sin embargo, cuando de logros se trata se lleva todas las medallas. De esta manera, no admitirá haberse equivocado en un momento dado, no recordar algo o haber tomado una decisión incorrecta. La culpa siempre recaerá en los demás.

 

Un líder sabe admitir sus errores y aprende de ellos, e incluso, procura no repetirlos. Además no se lleva el mérito del trabajo él solo, sino que comparte con los demás porque el trabajo es en equipo y en ningún caso él solo ha podido realizar una tarea en una compañía, sino que es gracias a la colaboración de todo un equipo de trabajo.

 

  1. Un jefe evoca miedo/ Un líder evoca respeto y confianza

 

Un jefe suele evocar una autoridad centrada en un estado de superioridad hacia sus empleados. Sus respuestas suelen ser autoritarias en lugar de colaborativas, pasando de estar sonriente un minuto y al siguiente estallar. Su opinión es la única que vale y la impone sobre la de los demás sin escuchar lo que puedan ofrecer.

 

Con un jefe no se puede establecer una relación de confianza porque falta comunicación, no es el tipo de persona a la que te acercarías a comentarle un problema o pedirle un consejo, porque eso podría ir en tu contra y que vas a encontrar un toque de atención en lugar de una mano tendida.

 

Un líder se gana el respeto cuando se involucra en el trabajo. El líder busca, no sólo resultados, él piensa en su equipo y, por ello, divide las responsabilidades. El líder no suele decir que tiene subordinados, sino un equipo. Está dispuesto a escuchar siempre a las demás personas y valora las habilidades de sus empleados, respetando sus dificultades y trabajando en conjunto con las personas para ayudarlas a superarse.

 

  1. Un jefe utiliza a las personas/ Un líder hace crecer a las personas

 

Un jefe trata a las personas de su empresa como “dispensables”, de hecho, “si alguien no puede hacer el trabajo, lo hará otro”. Suelen utilizar esta expresión como una excusa para obligar a las personas a hacer más de lo que deberían y dejar claro que, en cualquier momento, lo que no puedan hacerlo podrá venir alguien a sustituirles.

 

Un líder apuesta por sus empleados y se pone en su lugar. No exige niveles de trabajo que no dejen espacio para el aprendizaje y la creatividad. Cuando un líder observa que un empleado está fallando en algunas cosas, su primera relación no es amenazarlo con prescindir de él y buscar a otro, sino que lo ayuda y le pregunta si esa persona está bajo las condiciones de trabajo adecuadas para hacer su tarea correctamente.

 

  1. Un jefe dice “Yo…”/ Un líder dice “Nosotros”

 

El jefe quiere ser siempre el centro de atención. En cuanto puede aprovecha cualquier oportunidad para explicar algo sobre él, sobre las cosas que ha hecho y sobre cuánto ha triunfado. Sus opiniones suelen ser las mejores, sin embargo, las opiniones de los demás son desacreditadas. También es común que un jefe se muestre ante los empleados como una víctima: su tiempo es más importante, sus problemas o preocupaciones las únicas válidas.

 

El líder da un paso atrás para dejar que salga lo mejor de su equipo y así reconocer su valía. No habla constantemente de sí mismo, sino que pregunta a los demás sobre ellos. De esta manera, su equipo es consciente de que sus opiniones importan y que pueden aportar un mayor conocimiento en vez de ser un estorbo para sus objetivos. Un líder se involucra en el trabajo en equipo.

 

  1. Un jefe “sabe cómo se hace”/ Un líder “enseña cómo se hace”

 

El jefe siempre alardea de que saber hacer muchas cosas, deja claro que él sabe todo y que si él puede, los demás también. El único modo correcto de hacer las cosas es el suyo, aunque no lo enseñe.

 

Un líder enseña a los demás como hacer algo, les muestra sus tácticas, sus métodos, sus pautas y deja que los demás las lleven a cabo junto con él. En el proceso, además, cabe la posibilidad de que el líder aprenda algo nuevo sobre la manera que tienen los demás de hacer la misma tarea.

 

  1. Un jefe piensa a corto plazo/ Un líder piensa en el futuro

 

Las decisiones que toman los jefes solucionan problemas presentes pero no futuros. Se trata de casos de disposiciones rutinarias que implican poco riesgo para la empresa. El jefe no se lo piensa dos veces el poner por delante los beneficios económicos del día a día a los beneficios a largo plazo. No utiliza la ética empresarial.

 

Las decisiones que toma un líder no tienen efectos inmediatos, sino que representan una apuesta para mejorar con el tiempo. Por ejemplo, prefiere formar a sus trabajadores antes que despedirlos para ahorrar en costes fiscales o en salarios. Sabe que formar a alguien de nuevo es perjudicial y representa una pérdida del tiempo invertido hasta ese momento con el trabajador en cuestión

 

Recuerda que para ser un buen un líder se necesita determinación y constancia. Con el máster en Coaching (Desarrollo Directivo y Leader Coach) de EUDE Business School aprenderás a ser el mejor el mejor líder para dirigir equipos con éxito.

La empatía: por qué es importante en el trabajo

La empatía, o mejor dicho la falta de ella, puede interferir en las relaciones de trabajo, por ello, saber manejarla es muy importante en el ambiente corporativo, dado que permite el desarrollo de lazos más fuertes en la empresa.

 

Si eres una persona que se preocupa por la evolución de su vida profesional y busca poner en práctica su plan de carrera, la empatía es la clave al momento de discernir los mejores caminos.

 

La empatía permite a los líderes ser capaces de:

 

Los líderes empáticos hacen un esfuerzo para conectarse con su equipo, construyendo un sentido de confianza, apertura y comprensión que hace que los colaboradores se sientan apreciados, valorados, oídos, reconocidos y cuidados.

 

De esta manera, la empatía no es solo una competencia profesional, sino una cuestión de supervivencia en el ambiente colaborativo. Gracias a esta habilidad los trabajadores consiguen adecuarse a la filosofía de la empresa y entender sus necesidades.

 

Por consiguiente, la empatía permite crear lazos de confianza y colaboración entre los integrantes de una organización: se trata de cultivar buenas relaciones y retener talentos.

 

 

Los beneficios de la empatía en el mundo empresarial son los siguientes:

  1. Armonía emocional

Se crean mejores relaciones interpersonales y productivas entre los miembros del equipo, lo que genera un clima de trabajo favorable.

  1. Objetividad

Una persona empática tendrá una visión más allá de los prejuicios y buscará comprender a sus compañeros desde una perspectiva integral, por lo que su trabajo será más objetivo.

  1. Refuerza el aprendizaje

Las personas que sienten empatía por sus pares están abiertas a aprender de los demás, acercándose a sus creencias y reforzando su aprendizaje, adquiriendo así un conocimiento más profundo de la naturaleza humana.

  1. Consolida las relaciones profesionales

Las personas empáticas pueden desarrollar relaciones laborales más fuertes y duraderas en el tiempo debido a su facilidad para relacionarse. Esto es positivo tanto para su trabajo como para su carrera profesional.

Generalmente, se considera que una persona es empática si puede valorar a los demás, es decir, valorar lo que otros dicen, cómo se sienten y qué hacen. Por lo tanto, escuchan atentamente y hacen un esfuerzo por comprender sus inquietudes.

Algunos consejos para desarrollar la empatía:

  1. Escucha y observa

Resulta fundamental escuchar y observar los diferentes perfiles de las personas con las que trabajamos  (desde las más tranquilas y sonrientes, hasta las más serias y tensas)  para conseguir perfeccionar nuestro don natural de crear afinidades.

Busca interactuar con los demás sin prejuicios y, siempre que sea posible, estimula diálogos que demuestren un verdadero interés en percibirlos en su totalidad (con sus cualidades y defectos), permaneciendo atento a las cualidades.

  1. Intenta ser agradable

Procura comprender lo que es importante para la otra persona y esfuérzate por ser agradable. Lo importante es que la situación sea buena para ambos.

  1. Conéctate

Entiende lo que la otra persona busca y cuáles son sus necesidades. Una vez que hayas conectado con la otra persona, se podrá expresar de manera más asertiva. De hecho, puedes realizar preguntas para poder entender mejor el contexto.

  1. Mantén tu autocontrol

Realiza un esfuerzo por colocarte en el lugar de las otras personas para comprenderlas. Así, en este entrenamiento de convivencia positiva, serás capaz de lidiar incluso con las personas más explosivas, y lo que es mejor: sin perder el autocontrol.

  1. Busca el equilibrio

Una forma de no perder la compostura  al enfrentar a personas con comportamientos agresivos es imponerse, pero con actitudes inteligentes. Utiliza un tono de voz moderado, por ejemplo, ya que es un buen comienzo para desestabilizar a un provocador.

De este modo, ejercitamos y exploramos nuestra propia capacidad de afecto e interés por los demás, convirtiéndonos en personas y profesionales mejores.

  1. Confía

La confianza es la clave para que tenga lugar el proceso de empatía. Confiar en ti mismo y en la otra persona es fundamental para establecer una conexión.

 

Nuestra habilidad para aceptar y convivir de manera adecuada con los miembros de nuestro equipo de trabajo nos hace más empáticos y tolerantes, permitiéndonos transmitir nuestro mensaje de forma adecuada.

Las relaciones dentro de una empresa no tienen que basarse únicamente en la competitividad. Cuando hay empatía entre los miembros de un equipo, se pueden alcanzar metas mayores que cuando se toma en cuenta sólo el resultado individual.

El Máster en Coaching (Desarrollo Directivo y Leader Coach) de EUDE Business School está dirigido a los profesionales que deseen realizar procesos de Coaching, profesionales con equipos de trabajo a su cargo o gestores de personas.